sábado, 28 de febrero de 2009


Harta de tanta elección y de tanta imbecilidad de nuestros políticos he decidido irme a Ganimedes unos meses. Voy a descansar y a asistir a la 39 boda del rey Jonay.

Esta vez se casa con una jovencita de 20 años, lo que no esta mal teniendo en cuenta que él tiene cerca de 600. La chica es oriunda de la tierra, se la llevaron de aquí de pequeña y ya esta completamente integrada. Creo que es española, pero sabido es el entusiasmo que el rey tiene a nuestro país por aquello de que su madre fue gomera.

Mi primer problema fue que modelito llevar. No tengo ni pajorela idea de como se celebran allí los matrimonios. He preguntado y me dicen que muy sencillo que no hace falta vestirse de manera especial, así que me pondré mi túnica azul que hace juego con mis ojos. Coqueta que es una.

En Ganimedes casi todos la llevan blanca, pero a mi ese color me sienta como un tiro.

Esta noche espero que me vengan a buscar, se lo he dicho a mis nietos para que estén atentos y vean el platillo volante, no se lo creen.

Para la boda falta todavía un mes así que tendré tiempo de situarme y enterarme de como es eso.

Ya estoy aquí, el viaje bien como siempre, ni me entero entretenida mirando el universo.

Cuando llegue a mi ático coqueton, me encuentro con un aviso de su majestad, quiere verme.

A la una de la tarde ganimediana me presento en palacio dispuesta a tomarme mi whisky, ellos no beben pero me lo traen para mi.

- ¿Como estas niña? me saluda el rey.

- Tirando Majestad tirando. Hasta el gorro de mis compatriotas.

- Todavía no habéis echado a Zapatero.

- Que va, por eso estoy hasta las narices de mi pueblo, no tienen ni dos dedos de frente y siguen entusiasmados con él.

- Ya sabes que cuando quieras vamos allí y ponemos orden.

- No decía que no podían intervenir en la marcha de los planetas.

- Depende, si queremos si podemos. ¿Crees que debíamos de intervenir?

- Mejor de momento no, ya le avisare si se pone la cosa más fea. Hableme de su 39 esposa tengo ganas de conocerla.

- Sus padres eran gallegos y murieron cuando ella tenía dos años, por eso nos la trajimos con nosotros.

- Se acuerda de la tierra.

- Nada, pero si habla con un deje un poco raro, así como cantarín.

- Hablara con acento gallego, lo tienen bastante pronunciado. ¿Cuando podre conocerla?

- Hoy no, se ha ido a otro planeta a buscar muebles para sus dependencias de palacio.

Te he llamado porque tengo una misión que encomendarte.

Quede de piedra, después de la búsqueda de la científica secuestrada no tengo ganas de meterme en más líos.

- ¿De que se trata? pregunto algo medrosa.

- Mira, como con el asunto de la científica te fue tan bien, quisiera que me buscaras a un súbdito mio que fue a la tierra para un asunto y no volvió. Hace 10 años que no se comunica con nosotros y no sabemos nada de él.

- !Pero ha pasado ya mucho tiempo¡ por que se espero tanto para buscarlo.

- Niña nunca te das cuenta que tu tiempo no se mide como el nuestro. 10 años no es nada.

- Donde estaba la última vez que se supo de él.

- En EE.UU pero andaba por toda la tierra y creo que lo último que dijo es que se dirigía a España.

- Menos mal, empezare a buscar por allí. ¿Tiene algún signo característico que me ayude a reconocerlo?

- Los ojos penetrantes como todos los de Ganimedes, pero además tiene el pelo blanco y es muy aficionado a los animales de la tierra, le llaman mucho la atención. Como aquí no hay.

- Es algo para empezar. No correrá prisa, pensaba estar aquí dos meses.

- No, puedes empezar la búsqueda cuando vuelvas. Ahora cuentame ¿cual es la última de Zapatero?

Nos enfrascamos en una larga conversación. Tanto que no volví a mi ático hasta la noche.

Tendre que empezar a preparar una táctica para encontrar ese ganimediano, aunque todavía tengo dos meses nunca esta de más.

No hay comentarios:

Publicar un comentario