Cuando no tienen razón, no la tienen.

Están los catalanes en pie de guerra, y todo porque su Tribunal Superior de justicia les dice que tienen dos meses para que el idioma español tenga el mismo trato que el catalán.
Lo normal sería que estando en España no habría ni que decirlo. Lo lógico es que se estudie en catalán y español.
Pues no les da la gana y además dicen que no piensan cumplir la ley.
A que situación hemos llegado que se permiten decir eso y además apoyados por algunos miembros del gobierno.
Yo obligaba a todos esos políticos a que lleven a sus hijos a la enseñanza publica y no a la privada que es donde van.
En la publica se estudia en catalán, idioma que hablan cuatro, en la privada también en español, idioma que hablan millones en el mundo.
Así sus hijos crecen con clara ventaja sobre los demás.
Como sus votantes se lo permiten ahí están.

Los sindicatos son otro claro ejemplo de solidaridad.
Llevan 7 años sin manifestarse, motivos han tenido todos, pero como estaban muy bien pagados por el gobierno de izquierdas que nos disfrutamos, no dijeron ni Pamplona.
Ahora que empiezan a temer que llegue la derecha (lo que esta por ver) ya empiezan a movilizarse. Y desde luego solo en comunidades gobernadas por el PP.
Estando el panorama económico como esta, que pende sobre nuestras cabezas el corralito al estilo argentino, pues estos listos sindicalistas a la calle.
Y siempre encuentran a gentes que los siguen, aunque cada vez menos.

Si se presenta a presidente Jose Maria Fidalgo, lo voto aunque sea de izquierdas,
Nunca vi a una persona con tanto sentido común.
Se conoce que el sentido común no va con la izquierda, porque no lo votaron, en su día, para mantenerlo en el puesto.