Las mariposas y la muerte

          En una época de mi vida llegue a entablar relación con las mariposas.

Mis hijos se dedicaban a cazarlas y sabían como se llamban todas. Conocimientos que me trasmitieron. Poco a poco se me va olvidando todo. Es una pena.

        Las mariposas son unos insectos que nos alegran la vida volando por los jardines y haciendolos mas bellos con su colorido.

         Asi que cuando tuve ocasión de visitar un mariposario no lo dude. Fue en Icod de los Vinos, en la isla de Tenerife.

Una maravilla pasear rodeada de mariposas volando junto a ti.

          A estas alturas os estais preguntando ¿que tienen que ver estos insectos con la muerte?

Muy sencillo.

         En una ocasión cayó en mis manos un libro de la doctora Elisabeth Kübler- Ross. "La muerte, un amanecer" y en el unifica las dos cosas.

Esta mujer fue la mayor de trillizas, suiza, estudio medicina en contra de la voluntad de su padre. Luego se caso con un americano y se traslado a USA. Alli desarrollo la mayor parte de su carrera profesional. Y no digo mas porque cualquiera puede leer su vida en internet.

          En sus ultimos años (ya murio) se dedico a asistir a enfermos moribundos. ayudandolos a morir, charlando con ellos, enterandose de que pensaban y que veían.........etc

Algunos la tuvieron por chiflada por sus teorías, pero creo que al final se le reconocieron sus meritos.

          Pues esta mujer explicaba que la muerte era simplemente un cambio de estado, que no había que tenerle miedo, que era como cuando una mariposa sale de su crisálida. 

          No muere, simplemete pasa a otra fase de su vida.

Me parece una bonita comparación y muy poética.

Y maravillosa si fuera cierta.

          Una vez un cliente mio comunista y ateo me comento que no tenía ningún miedo a morir, pues habia estado al borde de la misma y había experimentado una serie de cosas (luz incluida) que le habín hecho perder el temor.

Cuando murio mi hermano a los 18 años, plenamente consciente y sabiendo que se iba a morir, estaba con los ojos cerrados y la familia a su alrededor. En un momento dado abrio los ojos y dijo:

- Dejarme marchar, que me vienen a buscar y no me dejais ir.

Y es que cuando uno se muere la familia lo atosiga con su dolor y no le dejan desprenderse suavemente de sus lazos con la tierra.

        Esto me hizo pensar y ahora cuando se muere alguien cercano procuro no interferir mucho. Todo lo mas sentada a su lado callada o alejandome un poco.

         Cuando cuento estas cosas la gente se horroriza:

- Pero que burra eres, hay que estar hasta el final, tiene que morir rodeado de su familia. 

Si, rodeado pero no atosigado. Hay que dejarle un espacio para que se vaya sin la preocupación de los que deja aqui. Hay que dejarlos volar libremente a donde tengan que ir.

          A lo que iba, la muerte según la doctora es un cambio de estado como el de las mariposas, asi es como hay que tomarla.

Otra cosa es que uno no tenga ganas, ni prisa en cambiar de estado.

PD. Esa doctora escribio varios libros sobre el tema. He leido algunos y a mi me interesaron.